sábado, 30 de abril de 2016

Una nana

La reconstrucción es en el momento de escribirla y amarla. No hay prisa para esta obra. Afectos y voluntad. Aliento de manzanas. Abrazos de palabras. Sanar. Mi ojos se rasgan al reir. Agujetas en la boca del estómago. Inmersión y todo esto sucede. El camino es mi corazón volador y curioso tal como es, negado para mentir. Torpe también. Pero hoy de las ruinas nace el cosmos. Los escombros han muerto. Significantes listos para viajar hasta otros planetas. Narrar la historia de cómo hemos llegado a ser universo, se entiende mejor de noche. Con el Principíto sentado en el balancín de mis pestañas que recita:
no me regales flores moribundas. Quiero semillas...dame...ya sabré hacer.
Susurro salado en tus sobacos antes de dormir...zzzzzzzzzz

La Rubiales en el Espejo (MJE)












lunes, 18 de abril de 2016

Tormenta

la enferma soy yo
no tú
la que llora...yo
tú no...tú nunca
la que sana por amor
también yo
no tú que casi no sabes querer
la que es consciente del abismo
yo
la que se rompe cada día
millones de veces
tú no sabes lo que es un rayo
que te divide en micropedazos
que pareces tan enferma y tan sola
y yo aquí sonriendo a los nadie
que me importan comino y medio
la enferma soy yo
pero me curo
me esfuerzo
me aferro
y lloro también
la enferma y su enfermera
la gente cree saber
quien es quien
cuando nos miran
yo recibo los reproches
de sus miradas, sucias
pero no tienen
ni puñetera idea...no...
(diálogo de un sueño)
La Rubiales en el espejo (MJE)













lunes, 4 de abril de 2016

Génesis del Miau

Todo está lleno de gatos....miau...mia...marramiau...mío...
Asómate desde mis bigotes a ver el ridículo mundo de los humanos.
Mi tótem es una gata anciana. Me enseña a soñar gatos pardos que cuentan con la paciencia. Tranquilidad suave. Me muestra gatos blancos que rezuman luz y gozan de sano alboroto. El abismo ámbar en cada ojo. Siempre.
Al comienzo llegaron los acontecimientos con disfraz de cotidianos.
Mínúsculos.
Insignificantes.
Entonces no sabía yo maullar ni una palabra. Se utilizó mi mudez para prenderme las venas como uña de gato. Engarfiase a mis capilares como bragas al sol.
Surreal, inconclusa.
Ahora conociendo el idioma sólo gusto imaginar gatos sabios. Gatos que son misívas, que me besan la frente, rasposamente. Y en ella nace una puerta para comprender a las estrellas. Para crear galaxias. Para engendrar motivos.
Mi tercer ojo de pupila rasgada.

La Rubiales en el Espejo (MJE)