sábado, 16 de julio de 2016

Otra galaxia



Gritáis demasiado. Os lo digo, vuestros gritos y cacareos ocupan todo el espacio. Por eso cogeré mi barquito en dirección al núcleo del planeta. Gracias Julio Verne por el "soporte". Aprovecho la nocturnidad acuosa para construir. Uso de argamasa mis más amados fluidos. Mucho flujo y algo de saliva, sin lágrimas, no me siento tan pedante-poética. Y nace (un tanto enana) la balsita, barquichuela, plataforma, escenario...imaginario. Suficiente. Papiroflexia con la vagina. Parir un recipiente hermético para miedos e incoherencias. Ya me voy, antes que amanezca. La luna llena me acompaña, esa de las tormentas venideras. Mi barco sobrevive siempre porque le eché humo de palo santo con el aliento. Perfumada en el entrecejo, acaricio mis sobacos para que llegue la calma. Ese instante en que los pies pisan y estrujan la tierra para luego llegar al líquido. Abajo, más abajo aún, abaaaaajo...tocar fondo musgoso, cosquillas viscosas y emerger de súbito. Retomo este barquito de papel. Periódicos empapados en mi sexo. Hojas donde sólo se anuncian desgracias. Primer y único juramento: ...cuando se acabe el mar construiremos con él una casita voladora...

MJE (La Rubiales en el Espejo)










































miércoles, 6 de julio de 2016

Cuarenta

En este bosque musgoso de árboles titánicos piso una piedra cúbica.
Se ha incrustado debajo de mi dedo gordo, pie izquierdo. La sustraigo sin dolor. Titila en ella una luz verderiscente perdida para este encuentro. Caminamos hasta toparnos de frente con mi niña interior. Grata sorpresa. Mucho tiempo sin verla. Sonríe. Brillan sus ojos y dice:
"No me riñas más"...
Quiere que vayamos a buscar tesoros entre las flores.
Imprescindible hundir los pies en la tierra sin pisar las lombrices y carcajear a la luna...
Suspiro. Mi chica cuervita, eso es lo que más feliz la hace. Con las rodillas costrosas y los bolsillos llenos de tesoros: una pestaña, una emoción, el canto del grillo. Ella no conoce el reproche, nunca lo usa y me mira a través del cuerpo adulto como si fuera translúcido para regalarme que soy bella.
Tiemblo, como cuando escucho mi canción favorita.
De acuerdo, buscaremos tesoros, eso necesitamos tú y yo ahora. Son días de  celebrar nuestro cuarenta cumpleaños. La recojo, la abrazo, limpio sus mocos. Ahí vamos niña fuerte, mágica, capaz de obrar los mayores milagros EN MÍ.

MJE (La Rubiales en el Espejo)


















lunes, 4 de julio de 2016

No deberia decir todo esto

He vivido años en una cálida cueva. Tierra para pisar y agua para beber. Soy frágil como un pétalo de amapola. A mi me da un aire y me quiebro entera.
Esa es mi fortaleza. Un día fuí a buscar el sol como quien abraza árboles y se empapa en lluvia. Altas dosis de miedo y convicción. Salir de la cueva para sanar la mirada sobre el mundo.
El milagro fué este arco iris que me habita.
Se elige vivir intensamente...para no morir en vida.
Entregarse para cuidar a la niña.
Asumir lo que sucederá...
La vida son cientos de espaldas que se alejan de tí,
corren despavoridas de tí,
temerosas de tí,
pues esa eres...aquí y ahora.
Aprender a llorar por lavarse los ojos...
El abandono,
la sensibilidad celebrada.
No está el mundo cocido para raros,
visionarios,
sanadores de alas,
besadores de utopía.
Aquí y ahora.
He confiado definitivamente.
Soy adicta al color.
Me arriesgo.
Sangre al caer del columpio.
Acontecimientos traen estos mensajes...
Coge tu dolor y construye algo nuevo con él.
Los bonsais que crecen en tu pecho algún día darán sombra.
Verdad conlleva inocencia...
Esa niña, esa, ya dije, es la más fuerte.
Por eso llora, por lo mismo la amo.
No es pantomima...yo sigo...gracias...

MJE (La Rubiales en el Espejo)